Shanghai Shanghai

大家好！que se lee algo así como 'dajia hao' poniéndole los tonos adecuados y cómo no, quiere decir, ¡hola a todos! Aprovecho esta invitación que se me ha hecho este blog para compartir experiencias desde Shanghai, una ciudad a la que todos los calificativos se le quedan cortos.

Shanghai es a China, lo que Nueva York a Estados Unidos, una ciudad única, capital de negocios, entretenimiento, pero que es muy distinta del resto del país. Y es que esta ciudad no deja de reinventarse, combinando las tradiciones chinas con las nuevas tecnologías y los nuevos ricos (pero muchos).

Las dos torres más altas de Shanghai, en Pudong (al este del río, literalmente).

Los contrastes son vertiginosos y las posibilidades infinitas. Para los extranjeros, llamados 'laowai' -una especie de equivalente de nuestro concepto de 'guiri'- hay tantas cosas que sorprenden, desde la comida china, la auténtica, que dista mucho de lo que se come en Europa generalmente, hasta los modales y costumbres. Y es que aquí lo primero que hay que hacer es escuchar, porque tenemos mucho que aprender aunque sólo sea por ver cómo las cosas pueden funcionar de otra forma. Y es que China, es mucha China, mucha historia, muchas regiones, mucha gente, mucho ajetreo... pensemos, que en esta ciudad vive aproximadamente la mitad de gente que en toda España, es que casi casi, se nos escapa el concepto, la cantidad de barrios que llega a haber es inabarcable! Y la variedad de gente, infinita... desde chinos de todo el país hasta extranjeros de todas las esquinas, indios, filipinos, sudafricanos, europeos, americanos...

Yo os animo a que si tenéis la oportunidad, visitéis esta ciudad a vuestro aire, porque es la manera de descubrir muchas más cosas a parte del famoso Bund, paseo de edificios art deco frente al río, con vistas a la zona financiera moderna, o los jardines Yu tradicionales. No obstante, aquí iremos hablando de todo esto en futuros posts.

Típico cartel que indica las calles, a la americana, muy práctico.